El uso del huevo líquido entero pasteurizado, la yema líquida y la clara líquida está cada vez más extendido en el mundo de la hostelería.
El huevo pasteurizado tiene la ventaja de prevenir posibles riesgos asociados a los huevos, sobre todo problemas derivados de la Salmonella.
En España rige el Real Decreto 1254/1991 del 2 de Agosto que establece directrices para la preparación y conservación de alimentos de consumo inmediato que incluyan huevo. El consumo de huevo pasteurizado es obligatorio en bares, restaurantes, hoteles, comedores sociales y comunitarios desde el año 1991.
El problema en la cocina de un bar o restaurante surge cuando el huevo se utiliza como ingrediente en crudo o poca cocción en muchos platos, porque no se garantiza la eliminación de bacterias como la Salmonella. Los huevos frescos categoría A se pueden utilizar en bares o restaurantes siempre y cuando se cocinen a más de 75ºC, temperatura establecida por la normativa y que asegura la eliminación de todo tipo de bacterias.
Las empresas dedicadas a la hostelería son responsables de la seguridad alimentaria de sus clientes y para ello, una buena práctica es la utilización de ovoproductos.
Además de la prevención de enfermedades, el huevo pasteurizado tiene las siguientes ventajas: fácil de utilizar y de dosificar, mayor seguridad bacteriológica, ahorro de tiempo y de mano de obra, fácil de almacenar, máximo aprovechamiento del producto.
El uso del huevo líquido entero pasteurizado, la yema líquida y la clara líquida está cada vez más extendido en nuestra dieta alimenticia.